LA REGIÓN

Se realizó en Mar del Plata el lanzamiento público de la campaña «El Nación no se vende»

En el marco de la campaña nacional que la Asociación Bancaria viene llevando a cabo en todo el país contra cualquier tipo de avance privatizador sobre el Banco de la Nación Argentina, la Seccional Mar del Plata este lunes realizó el lanzamiento público en la tradicional esquina de San Martín y Córdoba.

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En diálogo con Cazador de Noticias, Eduardo Zingarelli, titular de la Bancaria local, explico que «inicialmente la campaña, consistente en la recolección de firmas, se ha venido desarrollando dentro de las sucursales del Nación, dirigida fundamentalmente a sus clientes y trabajadoras y trabajadores, y en nuestra Sede de San Luis 2069, donde hemos estado recibiendo a Concejales y Concejalas y a los máximos referentes del movimiento obrero de la ciudad, agrupados tanto en la CGT, como en la CTA de los Trabajadores y la CTA Autónoma», añadiendo que «con este lanzamiento estamos iniciando una nueva etapa, la cual tendrá un carácter público con la intención de solicitar el apoyo de la ciudadanía en general».

Acto seguido, subrayó que «el Banco de la Nación Argentina es patrimonio de los y las argentinas y como tal debe seguir siendo una entidad estatal, no solo porque así lo marca su Carta Orgánica, sino porque es la herramienta financiera con la que el Estado debe implementar las políticas públicas necesarias para el desarrollo del país, y eso solamente lo puede hacer la Banca Pública, en este caso el Banco de la Nación Argentina con sus más de 700 sucursales ubicadas a lo largo y a lo ancho de nuestra patria y con sus 17.000 trabajadoras y trabajadoras que día a día atienden a los millones de clientes del banco más importante de nuestro país, muchos de ellos desatendidos por la Banca Privada, que solo escoge a aquellos que entiende le van a permitir seguir acrecentando sus ganancias a niveles cada vez mayores».

Finalmente, recalcó que «un detalle no menor es el hecho que nuestro Banco Nación es una entidad autárquica y que no da perdida, muy por el contrario, año tras año presenta balances con una importante rentabilidad, lo cual deja muy en claro que su intento de privatización esconde un negocio del que seguramente van a participar algunos pocos amigos del poder».

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