Reunión de catarsis en CGT

La mesa chica de la Confederación General del Trabajo (CGT) se reunirá el próximo jueves a las 11 horas para analizar los resultados electorales y reconfigurar la agenda de la central tras el triunfo de Javier Milei en el balotaje.

Será un encuentro de catarsis, con pases de factura y críticas cruzadas, en un escenario de tensión entre los sectores que componen la central y, sobre todo, de una fuerte incertidumbre de cara a lo que viene.

La entidad eligió mantener silencio tras la derrota de Sergio Massa el domingo, que también significó un mazazo al interior de una conducción que en unimidad de jugó todo por el candidato de Unión por la Patria. Buena parte de la conducción estuvo en el búnker oficialista y también se siente perdedora.

El silencio que aturde

Ahora vendrán tiempos de análisis y reflexión, tal como anticipó Jorge Sola, secretario de prensa, en declaraciones radiales. «Acá hay un fenómeno social que vas a más allá de Massa y Milei, y hay que tomar nota y recomponer los mensajes que la política tiene que dar», afirmó.

«Estamos obligados a que el análisis sea lo más certero», señaló Sola, a sabiendas de que la caída de Massa configura también un golpe hacia el interior del sindicalismo. O se reconfiguran o habrá caída libre.

Se espera que la CGT también plante bandera de cara a los empleados estatales y de empresas públicas, uno de los sectores que mayor conflictividad tendrá en los próximos meses, junto a los industriales si se concreta la apertura indiscriminada de mercados.

A su vez, habrá ratificación de los 15 puntos nodales que la central presentó a los candidatos en materia de trabajo y producción, y que desde el seno del presidente electo no hubo respuesta alguna.