Panaderos: Gastón Frutos envuelto en el escándalo de los barras bravas de Racing

La reciente detención de cinco barrabravas del club Racing de Avellaneda volvió a poner en escena al polémico sindicalista titular de la Federación de Panaderos (FAUPPA), Gastón Frutos, que ya no logra esconder la decadencia de una gestión, con denuncias por corrupción, fraude electoral y ahora fuertes vinculaciones con la delincuencia en el fútbol.

Las detenciones se produjeron tras un enfrentamiento en Ezeiza, luego de la decisión de uno los barras de Racing de recuperar el protagonismo perdido. El ataque fue liderado por Leandro Paredes, uno de los lazos directos entre la barra y el gremio de Panaderos, a través de Frutos, en una relación de amistad y cercanía con encuentros de celebración en cumpleaños y fiestas privadas. Mundo Gremial accedió a fotos y material fílmico que comprueban ligazón.

Según narró en Infobae el periodista especializado en barras, Gustavo Grabia, Paredes tomó el mando de la tribuna junto a Enrique Rulet a fines de 2021 con apoyo político y sindical. Pero a fines del año pasado, «Leo Parede» -del bando de Villa Corina- cayó preso acusado de liderar una emboscada a hincha de Deportivo Cali de Colombia. Con el por entonces líder detenido, la hinchada pasó a manos de otros barras.

Pero al quedar en libertad, Paredes, ladero del clan Frutos, intentó retomar el control del negocio en una disputa que terminó con una reciente gresca en el Aeropuesto de Ezeiza a la vuelta del viaje de los barras de Emiratos Árabes para presenciar la Supercopa del fútbol argentino que enfrentó a Racing con Boca Juniors.

El nexo directo entre el titular de la FAUPPA y el barra Leandro Paredes es Leandro Frutos, uno de los hijos del sindicalista, compañero de paravalancha del apresado por el reciente enfrentamiento en Ezeiza.

Las banderas de Panaderos decoraron el pasado 20 de enero el estadio Hazza bin Zayed donde la Academia y el xeneize disputaron la finalísima. Hasta allí llegaron los barras racinguistas que posaron en Abu Dhabi enbanderados con los trapos de la FAUPPA facilitados por Frutos, en una muestra más de la estrecha relación entre el dirigente y la hinchada académica hoy involucrada en una nueva interna.

Envuelto en un nuevo escándalo, el «rey» Frutos, actual tesorero de la CGT, aumentó la bronca entre experimentados dirigentes de la central obrera que transitaron durante décadas el mundillo sindical junto a su padre Abel y que hoy ven en Gastón un peligro constante, producto de los recientes hechos, entre otros, que lo vincularon con maniobras ilegales tal como reveló Mundo Gremial.

«Frutos convirtió al gremio en un búnker de violencia y delincuencia«, graficó con preocupación un dirigente gremial conocedor del círculo de influencia de Frutos y que supo ser testigo de la construcción de su padre Abel en la organización, hoy en pleno debacle con fuertes cuestionamientos en numerosas filiales del interior del país.

El excéntrico sindicalista siguió la nueva explosión de la interna de la barra de Racing desde las playas del caribe mexicano en Cancún, donde vacaciona en familia y con amigos entre yates de lujo, oros y extravagantes champagnes.

Gastón Frutos y los barras, una relación que perdura en el tiempo
La estrecha relación de Frutos con la barra de Racing y el mundo delincuencial del fútbol no es nueva. Ya en 2010 el actual Tesorero de la CGT nacional mantenía fuertes lazos con una de las facciones de la hinchada académica y de distintos clubes de primera división.

Tal es así que durante el festejo íntimo de su cumpleaños 30, en el Campo Hípico «El Pato» de Avellaneda, que contaba con la presencia de barras bravas, se produjo un fuerte tiroteo.

Las crónicas del momento relataron que un Volkswagen Bora estacionó en la puerta del salón, bajó un hombre que ingresó al lugar y comenzó a disparar contra los invitados de Frutos. Hubo heridos y no fue una tragedia de milagro.