Malestar en la CGT: Sin Massa, la central sindical realiza la primera reunión del año

El consejo directivo de la Confederación General del Trabajo (CGT) tendrá este jueves en la sede de Azopardo la primera reunión formal del año, con un orden del día centrado en la situación gremial, social y política y la organización de una movilización y acto por el Día del Trabajador.

Se espera la participación de todos los sectores que integran la central. Asistirán los cosecretarios generales Héctor Daer y Carlos Acuña, aunque por estas horas no estaría confirmada la presencia del cotitular Pablo Moyano, quien podría ausentarse por problemas personales, según confiaron a Mundo Gremial.

Sí representarán al moyanismo los integrantes del Frente Sindical, con Mario Manrique del SMATA a la cabeza, quien tuvo fuertes declaraciones contra la cúpula de CGT por disconformidad en las acciones para dar respuesta a las demandas de los trabajadores.

La convocatoria llegó después de fuertes discusiones y tratativas internas. No hay reunión de consejo directivo desde septiembre del año pasado. Existe mucho enojo en la cúpula y la mesa chica cegetista con el gobierno nacional. La promesa electoral a los trabajadores no se cumplió y la bronca va en aumento, a pesar de los canales de diálogo abiertos.

Según confirmaron a Mundo Gremial, el Consejo directivo se encuentra abocado en la redacción de un duro documento con pedidos precisos al gobierno nacional. Acciones urgentes para abordar la pobreza y la inflación, en un tono ya no tan amistoso.

“Los índices de inflación y pobreza deben encabezar las prioridades para la adopción de medidas y acciones urgentes. Toda la dirigencia en general debe tomar conciencia de que ya no hay más margen de deterioro económico sin riesgo de descomposición social», resalta el borrador del documento que presentaría la CGT, según confirmó La Nación.

Por ello, la central obrera instaría a la convocatoria de un consenso político, económico y social con el objetivo de alcanzar acuerdos para un programa de mediano y largo plazo.

El documento impulsaría que se promueva «el desarrollo, la producción y el trabajo como instrumentos necesarios y urgentes para superar la crisis y trazar un horizonte de crecimiento con justicia social”.

Movilización y acto con demandas

Uno de los principales puntos a abordar por la CGT será la convocatoria a una masiva marcha con acto incluido por el Día de Trabajador. La fecha elegida sería el 2 de mayo, y el lugar, el estadio de Defensores de Belgrano.

A pesar del enojo entre los máximos dirigentes, hoy está descartado el llamado a un paro general contra la gestión de Alberto Fernández. Sectores internos de la central sostienen que el gobierno no soportaría una huelga dada la compleja situación económica y social.

En el acto por el 1° de Mayo se esperan fuertes discursos y demandas a Fernández. En CGT entienden que las paritarias llegaron a un límite, con discusiones permanentes y sin mayor margen, y exigen soluciones a los problemas inflacionarios y de salarios.

La incomodidad del año electoral

Las elecciones de agosto y octubre no son un dato menor al interior de la CGT. Los movimientos que los dirigentes comienzan a dar generan tensiones y la idea de una central embanderada detrás de un candidato único pierda fuerza.

Desde lo político, el diálogo que la mesa chica generó con el ministro de Economía, Sergio Massa, y que parecía derivar en una cumbre con muestra de unidad se cayó.

Se esperaba que este jueves Massa recibiera a todos los sectores de la CGT, con una foto que reflejara a un movimiento obrero unido, de Moyano hasta Omar Maturano, pero a última hora el tigrense suspendió el encuentro, por lo que la construcción de un «candidato de los trabajadores» hoy es una incógnita.

La insistencia de un sector con la candidatura de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner sigue siendo una cuestión de debate, y que no suma mayores voluntades más allá de los fieles seguidores del círculo kirchnerista que encabezan Sergio Palazzo y Abel Furlán.